La Diputación
Provincial de Jaén custodiará el legado del poeta alicantino Miguel Hernández
(Orihuela, 1910 – Alicante, 1942), una labor que se centrará en la catalogación,
estudio e inventariado de esta obra por parte del Instituto de Estudios
Giennenses (IEG) de la Administración provincial con el objetivo de exhibirla
posteriormente en un edificio anexo al Museo Zabaleta de Quesada, tierra natal
de la mujer de este poeta, Josefina Manresa.
El legado está compuesto por 5.000
manuscritos, poemas, correspondencia, dibujos o primeras ediciones de libros,
entre otros documentos y elementos personales del poeta oriolano. El objetivo
del proyecto es potenciar culturalmente la obra para acercarla lo máximo
posible a la ciudadanía.
Miguel
Hernández empieza a escribir poesía en el año 1925, poemas que publicará en la
prensa local y provincial. Su principal fuente de inspiración es el entorno en
el que vive: la huerta, su patio, la montaña, el río, etc.
En
1933, tras su primer viaje a Madrid, se edita su primer libro, Perito en lunas. Un año más tarde ve la luz su auto sacramental Quién te ha visto y quién te ve y sombre de
lo que eras. Comienza a relacionarse con grandes poetas como Neruda,
Alberti, Rosales y Aleixandre. Poco después escribe el drama Los hijos de la piedra y el libro de
poemas El rayo que no cesa. Otros
títulos que merecen mención son Cancionero
y romancero de ausencias, Viento del pueblo, Teatro en la guerra, El labrador
de más aire.